El Centro de Estudios del Ejército inicia el debate sobre seguridad digital

(Para Alexandra Javarone)
21/04/20

La exposición a los peligros cibernéticos aumenta constantemente. La innumerable cantidad de datos que deben almacenarse y protegerse están dirigidos a la ciberdelincuencia, el espionaje, la ingeniería social y la manipulación social.

La hegemonía cultural cibernética más sofisticada ha estado en manos de actores estatales muy poderosos a expensas de los países con un déficit mayor en términos de soberanía digital. Esto empujó el Centro de estudio del ejército para iniciar el debate sobre el futuro y la seguridad digital.

El objetivo es mitigar las criticidades del sistema cibernético nacional y militar creando conciencia, implementando habilidades y competencias también a través de la colaboración más cercana con empresas del calibre de Cisco, Microsoft, Thales y Leonardo. También porque, si la web no conoce fronteras, y pertenece a la categoría virtual, lo cierto es que los intereses a proteger son más que materiales y pertenecen al Estado y la comunidad civil.

Un capítulo importante de la discusión se reservó para la contratación. La capacidad de afrontar los nuevos retos derivados de la hiperconexión requiere que el personal de ciberseguridad actúe con rapidez, colabore y desarrolle simultáneamente la investigación y la innovación. Para la innovación, la referencia es a los sistemas de armas, pero no solo, porque el campo civil y militar son de importancia estratégica para el país.

El entorno operativo es muy complejo, el uso de las nuevas tecnologías y la información a gestionar requieren un esfuerzo masivo en la selección y formación futura de los cuadros del Ejército. Los miembros del estudio cibernético del CSE creen "Estudios de ingeniería básica necesarios para la futura figura del ciberoficial y posterior especialización en cursos de ciberseguridad dirigidos al sector específico de uso".

También se debe reconsiderar la posibilidad de activar el sistema de certificación de Cisco y Microsoft, que podría representar una excelente herramienta para la formación continua del personal empleado en el sector cibernético. La figura del CISO, acrónimo de Chef Information Security Officer, también debe ser capacitada de acuerdo con los criterios que actualmente exigen las industrias (habilidades gerenciales y comunicativas). En cuanto a la formación, parece primordial la necesidad de potenciar las actividades formativas con plataformas de Modelado y Simulación, para puestos de
Ciberplanificación y conducción de operaciones en un contexto conjunto y / o internacional. Actualmente, la Escuela de Transmisión es la única organización del Ejército capaz de capacitar a los empleados en sistemas C4I de la Fuerza Armada, con acceso al Laboratorio de Capacitación en Defensa Cibernética (LADC) puesto a disposición por el Departamento de Seguridad Cibernética (RSC).

Las habilidades cibernéticas (ofensivas y defensivas) requieren, como es evidente, una fuerte integración del personal técnico en el proceso de planificación operativa: "El profundo conocimiento técnico de sus sistemas es, de hecho, la base de cualquier capacidad defensiva que uno desee establecer: tener un conocimiento profundo de las redes, sistemas y plataformas y gestionar correctamente las actualizaciones de seguridad o los desarrollos de software capacitivo son las bases para la interoperabilidad".