Maggie S. Lorelli: El espectáculo humano

Maggie Lorelli
Ed.Castelvecchi, Roma 2022
pagg.173

"La gente se movía, con los pies en el suelo. Libremente.

Eso fue ayer.

Hoy, todo gran centro urbano tiene su periferia digital, más allá de los límites del Círculo. Las selecciones de elegibilidad tienen lugar en el interior, para cambiar de estado: aquellos que demuestren que saben mantener un control total sobre sus emociones y tienen una determinación férrea pueden irse a vivir a Nexus.

Este es el incipit de la novela, cuyo título hace referencia a "El show de Truman", famosa película estrenada a finales de los noventa. Por un lado, por tanto, la ciudad real, es decir, el Círculo, por otro las ciudades virtuales de Nexus, donde viven. “seres biónicos deshumanizados llamados Idol, o más comúnmente byo”, que, venerados por millones, deben “produciendo historias imaginativas y experiencias sensoriales a un ritmo elevado”, transmitido a los usuarios del Círculo conectado a trenza, la red neuronal global Marya es una byo muy popular.

“Gracias a sus conmovedoras transmisiones, miles de chicas en el Círculo alimentan su hambre de notoriedad”. Por otro lado, en el Círculo, está Filippo, un ex librero que, en Nexus, aspira a ir allí. Ellos "está dispuesto a ir a cualquier parte para escapar de una existencia gris que, al carecer de su biblioteca, se le presenta como una trampa mortal" pero, para poder transferirse a Nexus, debe someterse a una prueba de aptitud y motivación.

Marya “Ella siempre ha sido buena para ocultar sus sentimientos. Es por eso que pudo pasar la prueba fácilmente”..

Y luego está Adán, el hombre estrella, ingeniero informático y emprendedor visionario, que “dio a luz al negocio del siglo: la alienación de la realidad a través de la migración a una dimensión ilusoria, posible gracias a la afiliación masiva. Ha decidido dispensar felicidad a los humanos diseñando una realidad ficticia en la que pueden dar forma y sustancia a sus deseos renunciando a sus emociones negativas”. Vive en una estación espacial. Nexus es su creación. “En el primer período de difusión masiva de brainet, reina el caos en las calles; uno deambula a ciegas, siguiendo los simulacros de la red. Cada imagen es producto de una transmisión mental de los Ídolos de Nexus, venerados como dioses y defensores de una dimensión ilusoria que permite a los habitantes de ciudades bárbaras, aquellos que no lo han logrado, soñar despiertos con una vida brillante.

Este es el escenario futurista pero también muy actual en el que se mueven los personajes de esta novela de Maggie S. Lorelli -una personalidad ecléctica que se divide entre la actividad concertística, ya que es música, la escritura y la docencia en un instituto- donde es fácil de captar una alegoría del mundo desbordado de redes sociales e influencers que caracteriza nuestra era.

En la ciudad de Felipe la mayoría de la gente "debe resignarse a una vida de penurias, con el único consuelo representado por las efímeras gratificaciones que vienen del mundo virtual" y vive “Hacinados dentro de las casas, donde casi siempre están conectados, cada uno perdido en su propio mundo. [...] Si alguien no se conecta [...] se le etiqueta y se le considera un inadaptado social".

En el libro no podía faltar la figura del androide Daniel, que irrumpirá en la vida de Marya. Pero no será el único en hacerlo. Felipe, "Desde hace un tiempo, él comenzó a escribirle largos mensajes que tienen el sabor de antiguas cartas de amor". Y entre ambos se crea una especie de correspondencia, un comportamiento no prohibido, mientras que, por otro lado, la normativa Nexus prevé "la prohibición de tener relaciones directas con humanos del Círculo". Todo esto no escapa a Adam que también irrumpirá en la vida de Marya. Ellos "creía conquistarla con el asombro de unas vacaciones espaciales, con la arrogancia mezquina de una enorme joya artificial, sin tener idea de que el amor de una mujer está en el sentimiento, y no ya en el hacer y en el exceso". Efectivamente, María "En una repentina oleada de rebelión, derriba de un solo golpe todos los clichés que quieren que las mujeres sean amigas de los diamantes" y huye, logrando llegar a Roma y encontrar a su Felipe.

¿Cómo? “Las energías humanas, cuando se sintonizan en la misma banda, se atraen entre sí como un poderoso imán”. Juntos deciden refugiarse en un lugar donde viven “seres simples, que profesan ser felices, que viven por vivir, […] desprovistos del frenesí del tener que aparecer y del frenesí de la comunicación sin alma”, un lugar, por lo tanto, aún no alcanzado por la cobertura de la red.

Aquí es donde “el contacto cotidiano, sin el filtro de la virtualidad, les permite mostrarse desnudos en su vida interior y puros en su esencia”.

Gianlorenzo Capano