El OTAN Hub: un laboratorio innovador para la evolución del Enfoque Integral

(Para Ivano Fiorentino)
31/08/17

El tema del orden global siempre ha tenido una importancia fundamental en el debate político-filosófico. Y a partir del segundo período de posguerra, ha adquirido más interés, por lo que requiere análisis cada vez más integrados y sistémicos.
Un ejemplo sería el informe. Riesgos globales del Foro Económico Mundial (más). Después de más de diez años de cuidadoso análisis, también para el 2017, el Foro de Davos ha identificado una densa red de situaciones de riesgo que genera una polarización político-social muy peligrosa. Dinámicas degenerativas relacionadas con los sectores económico, ambiental, geopolítico, social y tecnológico y que pueden crear más caos en el ámbito internacional.

Sin lugar a dudas, aún se debate mucho una definición objetiva y compartida de "orden global". En cualquier caso, el problema central es entender si y cómo los actores globales (especialmente los estatales) pueden elegir interactuar y cooperar por un bien común. Esto se ve contrarrestado por la fragilidad del escenario internacional, que aún carece de un sistema bien estructurado y efectivo. Específicamente, haciendo uso de un principio de libre adhesión y participación, las "paradojas" que pueden comprometer la estabilidad local y regional se alimentan inevitablemente.

En este clima de desintegración progresiva, cualquier enfoque analítico puede parecer una vana utopía. Una actitud pesimista que termina alimentando las llamadas formas de "identidad" (v.articolo).
Por el contrario, es interesante observar la postura adaptativa de la OTAN frente a los nuevos desafíos del orden mundial. Anclada en los principios fundadores de la Alianza, después de Wales 2014, paralela a las medidas para el flanco oriental, la OTAN también ha centrado la atención en el frente sur.
Desde el causas fundamentales y los efectos de Medio Oriente y África del Norte (MENA) están cada vez más interconectados, la idea central es contribuir al orden mundial y fortalecer el sistema de cooperación internacional. En esta fase histórica de "Desglobalización" y de alta fluidez, donde las masas pueden ser fácilmente influenciadas y aterrorizadas, el principal desafío es evitar un mayor deterioro y al mismo tiempo revertir la tendencia.
Para ello, el proceso es siempre el mismo: analizar, comprender, actuar y evaluar. Un ciclo continuo, que la OTAN lleva experimentando desde hace años. Y para aumentar su efectividad e incisividad, se diseñó un centro regional. Una nueva capacidad que pronto estará activa en el área de Nápoles.
Toda la información sobre la región MENA fluirá hacia este centro, donde serán corroborados por un grupo de analistas y capitalizados a través de la intensa actividad de enlace con actores no pertenecientes a la OTAN (Universidades, Centros de Investigación, Socios, Think Tanks, ... y OI / ONG). Esto debería permitir no solo mejorar la comprensión de las amenazas y los desafíos provenientes del lado sur de la OTAN, sino también sugerir las políticas de intervención adecuadas, que deben emprenderse y desarrollarse junto con otros actores del ámbito internacional.

La clave del Hub podría ser la Enfoque integral. Una "filosofía" con gran potencial, cuyos embriones se remontan a Sun Tzu. Una metodología en continua evolución, que no puede limitarse a un campo específico. En este contexto, el proyecto Hub de la OTAN podría ser el comienzo de una nueva fase experimental, dirigida a mejorar la Enfoque integral, no solo en la perspectiva militar.

La lógica sistémica moderna ASCOPE - PMESII es la base para los planificadores militares (en todos los niveles). A partir de la situación real se identifican los principales "hechos", y su interconexión permite derivar "consideraciones".
Numerosos sistemas para recopilar y gestionar información están disponibles en el mercado, lo que facilita la organización lógica de los hechos. Lo mismo se aplica a su interpretación. Sin embargo, la centralidad de los recursos humanos sigue siendo así. Y el valor agregado de la actividad de evaluación se vuelve máximo gracias a la participación conjunta de expertos civiles y militares.

Hoy en día hay muchos Centros de Investigación que proporcionan análisis meticulosos para comprender los problemas que afectan a la región MENA. De ahí la necesidad de involucrarlos y fortalecer un camino común en la perspectiva de Enfoque integral.

¿Pero cómo asegurar y optimizar esta interacción?

Una primera paso ser abordado es el "lenguaje". Una base común que permite integrar herramientas civiles, militares, nacionales e internacionales, terminologías y metodologías para un propósito común. Teniendo en cuenta su pasado y su evolución, es muy probable que una ayuda pueda provenir de la "teoría de juegos". Basado en los pensamientos del prof. Aumann (foto), uno no puede prescindir de un paradigma descriptivo-predictivo. Una herramienta que, en el campo de lo "futurista", es capaz de evaluar las posibles elecciones-acciones de los actores individuales y sus consecuencias-reacciones en el sistema de referencia. No es un esquematismo rígido y limitante, por el contrario, es una forma de ayudar a la comprensión de un sistema complejo y también de facilitar la toma de decisiones. En este sentido, las tablas, gráficos, tendencias, así como los productos analíticos embellecedores, se vuelven muy útiles para apoyar acciones corales. full spectrum Para lograr un bien común.

Con referencia al NATO Hub, una aplicación práctica de esta metodología (integrada por los principios de la "Teoría de juegos") podría ser el análisis del grado de conexión entre las organizaciones terroristas y criminales, y su impacto en el fenómeno migratorio desde el norte de África. Sobre este tema, por ejemplo, "enne" puede desarrollarse para escenarios futuros (a nivel micro o macro) y asociarse con los niveles relativos de probabilidad y riesgo de estabilidad. Estas evaluaciones, enriquecidas por la experiencia de los analistas, constituyen el marco de referencia para formular "recomendaciones" precisas, que obviamente no pueden limitarse a los instrumentos económicos y políticos tradicionales.

En conclusión, por lo tanto, la iniciativa Hub de la OTAN no debe entenderse como una mera capacidad de Alerta temprana. De manera más general, el Hub está pensado como un laboratorio innovador, del cual la OTAN puede beneficiarse no solo para el Medio Oriente y el Norte de África.
Además, en una visión positiva ya largo plazo, estos beneficios podrían extenderse a escala global. De hecho, el Hub podría garantizar el desarrollo de una lógica global dirigida a identificar riesgos y amenazas globales. ¡Al mismo tiempo, este centro podría fortalecer las premisas para un compromiso colectivo más concreto con el orden mundial!