Grupo Naval dicta las líneas del submarino del futuro

(Para Tiziano Ciocchetti)
16/11/20

Como en todas las ediciones de Euronaval, el fabricante francés Naval Group presenta un nuevo concepto de submarino.

En general, este enfoque no busca satisfacer una necesidad operativa expresada por la Fuerza Armada, sino demostrar la posibilidad de producir nuevas tecnologías anticipando los escenarios de las próximas operaciones navales.

Ya en 2016, Grupo Naval presentó el SMX 3.0, un proyecto submarino adaptado a la "Generación Z", es decir, que creció simultáneamente con el auge de las tecnologías digitales. La idea era integrar sistemas de TI totalmente interconectados, fiables, seguros, rápidos y escalables. Y a diferencia de proyectos anteriores, este concepto no ha mostrado cambios estructurales importantes con los submarinos actuales que sirven en las principales armadas de todo el mundo.

Para la edición 2018 de Euronaval, las oficinas de diseño del Grupo Naval se atrevieron aún más con el proyecto SMX-31, cuya apariencia nada tiene que ver con los submarinos actuales, ni siquiera con los conceptos presentados previamente por la Fabricante francés, como el SMX-25, presentado en 2010.

De hecho, este SMX-31 parece ser el resultado de una evolución del SMX-26 caimán, que, presentado en 2012, tuvo la particularidad de no tener torreta. Esta idea no solo ha sido revivida, sino también mejorada para este nuevo concepto de submarino.

Teniendo en cuenta que, en el futuro, será cada vez más difícil que los submarinos pasen desapercibidos debido a la proliferación de medios de vigilancia submarina (drones, sensores, observación satelital, etc.), por lo que los ingenieros del Grupo Naval han imaginado un barco completamente sin torreta. (que reduce la firma acústica), equipado con dos propulsores laterales en lugar de la hélice tradicional.

Como está escrito en el sitio web de Mer & Marine, que fue el primero en exponer las explicaciones del Grupo Naval sobre este concepto. “El SMX-31 parece un cachalote, que tiene una" forma hidrodinámica casi perfecta ". De ahí sus líneas muy fluidas, gracias a un nuevo planteamiento arquitectónico, que le confiere una mayor solidez, así como la posibilidad de aterrizar con mayor facilidad en el fondo marino. Esto ofrece varias ventajas, empezando por la de esconderse o incluso permanecer en una zona durante mucho tiempo para reunir inteligencia gracias, subraya el industrial, a sus “potentes sensores acústicos, optrónicos y electromagnéticos”. 

Lo que el SMX-31 pierde en altura lo gana en parte en ancho, su envergadura es de 13 metros por una longitud de 70 metros y un desplazamiento de 3.000 toneladas. Su revestimiento, indispensable para la discreción, es en forma de escamas que, fabricadas con un material especial, integran sensores.

El submarino también podrá utilizar robots y drones para recopilar información. En comparación con los submarinos actuales, podría monitorear una superficie diez veces mayor.

En términos de propulsión, el SMX-31 utiliza pilas de combustible y baterías basadas en tecnología de iones de litio. La capacidad de este último sería seis veces mayor que la actual en el mercado. Suficiente para darle la oportunidad de bucear durante 40 días, navegando a una velocidad de crucero de 6 nudos.

Desde el punto de vista del equipamiento de armas, el SMX-31 puede transportar hasta 46 sistemas de armas, incluidos misiles de crucero SCALP NAVAL (alcance máximo de 1.600 km) y torpedos pesados ​​antibuque MM-40 EXOCET, F-21. Tenga en cuenta que también sería capaz de transportar alrededor de quince asaltantes para operaciones especiales. También es concebible un sistema de misiles tierra-aire de corto alcance (derivado de la conversión de un misil aire-aire).

Imágenes: Grupo Naval