Las imágenes y videos que nos llegan desde la República de Artsaj (Nagorno Karabaj) muestran los efectos de la artillería azerbaiyana en los centros habitados, causando víctimas entre la población civil.
Como todas las ex repúblicas soviéticas, el ejército de Azerbaiyán también tiene piezas de artillería y lanzacohetes de campaña de fabricación rusa. En esta etapa del conflicto, el Ejército de Bakú está utilizando ampliamente, al menos en esta fase de operaciones, el lanzacohetes múltiple 12A300 SMERCH de 9 mm (52 barriles), los cohetes están armados con ojivas que contienen submuniciones (además de la posibilidad de llevar estándar y químicos).
A diferencia de lo que piensan los no expertos, el uso de la artillería en los conflictos modernos está muy extendido. En la guerra de Siria, los rusos desplegaron varias piezas de artillería, tanto de un solo cañón como de varios cañones, que jugaron un papel fundamental aunque poco publicitado.
Los armenios también tienen algunos especímenes de SMERCH equipados y los usaron para atacar las bases aéreas de Ganja (hogar de los F-16 turcos y UCAV Bayraktar) y Beylagan (desde donde operan los helicópteros de ataque Mil Mi 24/35 ).
El SMERCH es un sistema de armas de saturación de área diseñado por los soviéticos durante la Guerra Fría para destruir las unidades blindadas de la OTAN en campo abierto. Su uso en áreas residenciales es una abierta violación del derecho internacional.
Sin embargo, el SMERCH no es el único lanzacohetes por el que los armenios tienen que preocuparse, de hecho, si el avance azerbaiyano continúa, los civiles que permanecen en los centros habitados de Karabaj también tendrán que preocuparse por el TOS-1 (18 copias suministradas al Ejército azero - foto), un lanzacohetes autopropulsado de 220 mm con ojivas termobáricas. A pesar del corto alcance (unos 6 km), las ojivas termobáricas son capaces de matar a las personas que se refugian en sótanos, fortificaciones de campo o refugios naturales. Esto es posible porque están compuestos de gas explosivo, que se difunde en el aire después del impacto y luego se enciende. Su detonación provoca una onda de sobrepresión, matando a cualquiera que no esté dentro de un entorno hermético.
Foto: MoD Fed. Russian
