Concluyó la operación antipiratería de Nave Martinengo en el Golfo de Guinea

(Para Marina Militare)
20/12/20

Regresó hoy a Taranto Nave Martinengo. Partió el 1 de septiembre y tras más de 111 días de actividad operativa, la fragata abandonó las turbulentas aguas del Golfo de Guinea, donde opera desde septiembre. Una breve parada logística en España, en la Base Naval de Rota, donde la fragata italiana se interesó por la visita del embajador italiano de España y Andorra, si Riccardo Guariglia, y la unidad reanudó la navegación hacia su base en Taranto. .

La actividad de Nave Martinengo fue un claro ejemplo del compromiso de la Armada italiana con la seguridad y protección de los intereses nacionales en los más complejos teatros internacionales, como el Golfo de Guinea, la zona del mundo hoy más afectada por fenómenos de piratería.

La unidad ha culminado con éxito las operaciones que se le ha encomendado realizar en estas aguas, a favor de la protección de la libre circulación de mercancías por vía marítima y la libertad de navegación. Pudiendo aprovechar dos helicópteros SH-90 y tres botes inflables, la tripulación del Martinengo y los equipos especializados de la brigada marítima a bordo San Marcos (BMSM) y el cuarto grupo de helicópteros, pudieron intervenir eficazmente en numerosos escenarios operativos.

16.500 millas recorridas, 143 horas de vuelo, más de 500 unidades mercantes monitoreadas, 164 interrogatorios, contactos casi diarios con 87 unidades mercantes italianas o unidades pertenecientes a la armería nacional que operan en la zona, son solo algunas de las cifras que caracterizaron esta misión.

Pero el recuerdo más significativo que las mujeres y hombres de Nave Martinengo traerán consigo, son las palabras de agradecimiento recibidas de otros marineros que navegan por esas aguas a bordo de los buques mercantes, que en varias ocasiones han expresado su agradecimiento por la sensación de seguridad que transmite la presencia del buque militar italiano y, más aún, con motivo de intervenciones directas para proteger a la gente de mar. De hecho, hubo varios hechos de piratería en los que intervino la fragata italiana. Partiendo de lo más relevante, el 7 de noviembre, cuando la unidad frustró un ataque de piratas en curso sobre el barco con bandera de Singapur "Torm Alexandra", poniendo a los piratas en fuga, incluso entablando un breve tiroteo con helicóptero a bordo. A los 7 días, la unidad volvió a intervenir en apoyo del buque "Zhen Hua 7", a bordo del cual se encontraba un marinero de nacionalidad china gravemente herido que fue rescatado por el personal médico de la fragata italiana y posteriormente trasladado en helicóptero. al hospital más cercano en la isla de Santo Tomé y Príncipe. En otros dos casos Nave Martinengo pudo localizar y asistir a dos unidades mercantes cuyos rastros se habían perdido, en un caso incluso durante 6 largos días, luego de ataques de piratería.

Entre los objetivos operacionales alcanzados, destaca la importante oportunidad de coordinación que ofrece la presencia simultánea en la zona de otras armadas aliadas, en particular Estados Unidos, Francia y España, y de la creación de capacidad y cooperación con las armadas regionales. Ghana, Togo, Benin, Costa de Marfil, Congo y en particular Nigeria, son los países con los que los Marines han realizado ejercicios conjuntos con el objetivo común de aumentar la interoperabilidad entre los distintos activos y ayudar a mejorar las condiciones de seguridad marítima en la región.

Por último, no menos importantes fueron los ejercicios de seguridad marítima organizados en competencia con las asociaciones de la armería nacional CONFITARMA y ASSARMATORI y en los que participó el petrolero. Enrico Fermi y el portacontenedores MSC Augusta en escenarios realistas de lucha contra la piratería, así como un ejercicio desarrollado con una instalación off-shore gestionado por ENI en Nigeria. El Embajador Guariglia mostró mucho interés y aprecio por la actividad de la Armada en el Golfo de Guinea, extendiendo luego su saludo y agradecimiento a un representante de la tripulación que pudo conocer en la cabina de vuelo de la unidad, con el mayor respeto. de las regulaciones Covid-19 implementadas por el comando a bordo. En el transcurso de su saludo, el embajador subrayó el papel diplomático de las unidades de la Armada, como embajadas de nuestro país en los mares y países del mundo donde se encuentran empleadas. Para la tripulación del barco Martinengo, la visita de una autoridad autorizada como el embajador italiano de España y Andorra, fue un momento gratificante como corolario del intenso trabajo realizado en los últimos meses para proteger los intereses nacionales.