Ayer por la mañana los escuadrones antiaéreos del 10º Regimiento de Ingenieros de Cremona llevaron a cabo una exigente operación de recuperación en el sótano de la Estación Central de Milán, en las inmediaciones del Memorial de la Shoah.
En total, se encontraron 24 granadas de mano de diferentes nacionalidades, muchas en excelente estado y todas datadas de la Segunda Guerra Mundial.
Luego del reconocimiento y seguridad, los escuadrones de bombas transportaron las bombas a la cantera Campana en Buscate (MI) donde fueron destruidas. Las operaciones de recuperación se llevaron a cabo rápidamente gracias a la sinergia de todos los sujetos institucionales involucrados, coordinados por la prefectura de Milán y por el comando del ejército alpino.
Los especialistas del 10º regimiento de ingenieros de zapadores intervienen casi a diario para la recuperación de los restos de guerra en todo el territorio de la región de Lombardía, donde se han destruido más de 500 bombas en el último año.
El Ejército, gracias a las capacidades de los departamentos de ingeniería, además del uso operacional en misiones internacionales, interviene en casos de necesidad de rescate y apoyo a la población, en el despeje de dispositivos como en casos de desastres públicos. Con su Centro de excelencia de Counter-IED, ubicado en la ciudad militar de Cecchignola en Roma, el Ejército es el encargado de entrenar a los escuadrones de bombas de todas las Fuerzas Armadas, Fuerzas de Policía y Cuerpos Armados del Estado.
