El contrato para el suministro de 86 sistemas “Blindo Centauro 2” fue firmado por la Dirección de Armamento Terrestre (DAT) y el consorcio Iveco - Oto Melara, con una posible opción por 10 plataformas más.
La adquisición en cuestión, continuación natural de un proceso ya iniciado en 2018 y que tiene como objetivo satisfacer una necesidad total del Ejército italiano de 150 vehículos, forma parte de las actividades previstas por el Estado Mayor del Ejército destinadas a dotar a los regimientos de caballería de línea de una plataforma que, incorporando las más recientes innovaciones tecnológicas, pueda ser utilizada, con la máxima seguridad, incluso en Teatros Operativos caracterizados por un alto nivel de amenaza.
La Centaur 2 representa un paso adelante excepcional en comparación con el anterior Centaur I (las dos versiones en la foto de abajo, nota del editor) en términos de potencia, observación, movilidad, ergonomía, comportamiento de disparo, comunicación y, por supuesto, máxima protección para la tripulación. Equipado con un motor moderno de más de 700 CV y la transmisión H, típica de los vehículos blindados 8x8, el Centauro II utiliza una arquitectura totalmente digital y una torre de nueva generación con cañón de 120 mm y sistemas de comunicación de mando y control que lo convierten en uno de los más modernos de los medios suministrados al Ejército. El resultado es un vehículo blindado innovador capaz de operar en cualquier escenario: desde misiones de defensa de la seguridad nacional, operaciones de apoyo y mantenimiento de la paz hasta cualquier otro teatro operativo en el que el Ejército esté llamado a intervenir.
La empresa representa un ejemplo de virtuosa actividad de colaboración a través de la cual el Departamento de Armamento Terrestre ha expresado su alta capacidad técnico-administrativa. La labor del DAT ha permitido llegar a la firma del contrato que permitirá a la Fuerza Armada utilizar un vehículo que garantice altos niveles de protección al personal, tecnológicamente avanzado y con prestaciones de vanguardia.
El Ejército italiano se confirma como un faro de tecnología e innovación y continúa su proyecto más amplio de racionalización y desarrollo de capacidades a largo plazo, un proceso de transformación tecnológica que continúa involucrando al sistema de producción nacional.
