A la sombra de la guerra ruso-ucraniana, entre intereses y múltiples responsabilidades (ajenas), China se beneficia silenciosamente y extiende su influencia política y militar.
Durante décadas, una visión occidental miope ha favorecido las ventajas económicas inmediatas sin considerar las implicaciones políticas y sociales a largo plazo. Hoy la constante violación de las reglas ha comprometido la estabilidad global.
¿Por qué fracasó la ilusión de que el bienestar chino podría conducir a un ajuste político e institucional democrático?
¿Por qué favorecer los oligopolios y las dictaduras ha creado un terreno fértil para las crisis internacionales?
¿Por qué no deberíamos hacer hoy comparaciones indiscriminadas entre las economías de paz y de guerra?
¿Qué debemos hacer para prepararnos para lo que se avecina?
Lo discutiremos esta noche a las 21.00 junto con Francesco Pontelli (economista, consultor empresarial y periodista económico) y al público en general Giuseppe Morabito (miembro de la junta directiva de la Fundación del Colegio de Defensa de la OTAN).
Nos vemos allí!
Foto: Ministerio de Defensa de China