Altare della Patria, ayer último homenaje a las banderas de combate de ocho unidades navales inhabilitadas del servicio

(Para Marina Militare)
14/04/17

La ceremonia de entrega de las banderas de combate de ocho unidades navales de la Armada tuvo lugar ayer por la mañana en el Santuario de las Banderas del Vittoriano; un acto solemne con el que la Fuerza Armada rindió homenaje a las naves que han concluido su exigente y plurianual actividad al servicio de la comunidad y en defensa de los intereses marítimos nacionales. Un tributo que se paga a través de un ritual que se repite cada vez que un barco militar termina su vida operativa.

En presencia del Jefe de Estado Mayor de la Armada, Almirante Valter Girardelli, el comandante en jefe del equipo naval, Almirante Donato Marzano y los ex comandantes de las ocho unidades, las banderas de combate de la fragata. Mistral, de la patrulla del equipo granaderode las corbetas MinervaSibillaUraniaDanaide y de los mineros Sapri e Lerici, contenidos en los féretros donados por las Asociaciones de Combate al entrar en servicio las respectivas naves, fueron entregados al Santuario de las Banderas, símbolo de la memoria y la unidad nacional.

La bandera de combate, con la que están equipados los barcos militares debido a una antigua tradición transmitida por las Repúblicas Marítimas de Venecia y Génova, representa la esencia de la Armada, el barco y su tripulación; es el alma de Italia en el mar.

"Izada a tierra" sólo cuando el barco es llamado para defender a la nación y su gente "en armas en el mar", la bandera de batalla es "algo más" que la que se iza y se baja diariamente; Según el periodista Arnaldo Fraccaroli, "incrustado" en la Primera Guerra Mundial, cuando se golpea la bandera de batalla "es como si el barco ondeara su vida en la antena, es como si el espíritu divino de la Patria se levantara para bendecir y proteger ".

Después de recordar los momentos principales de la vida operacional de Mistral, granadero, Minerva, Sibilla, Urania, Danaide Sapri e Lerici, el jefe de Estado Mayor de la Armada quiso dar crédito a sus tripulaciones: "El mínimo común denominador de estas unidades son ustedes, los comandantes, oficiales, suboficiales, licenciados y marineros que con su trabajo, su dedicación, su el cariño hacia el 'Hierro' del que están hechos estos barcos, los has hecho vivos y forjado en su memoria eterna a lo largo del tiempo ... te has ido alternando a bordo de estas unidades, de las que quedan las Banderas de Combate, para que todo aquel que vaya que en su visita a este Santuario lo conozca directamente, le rinda homenaje y, inclinando la cabeza, esté siempre agradecido ”.