De Premuda al conflicto cibersubmarino

09/06/23

El día de nuestra Marina conmemora la hazaña de Premuda del 10 de junio de 1918. Este año las celebraciones tendrán lugar el 9 de junio en La Spezia donde acaba de finalizar Seafuture (convención de tecnologías marítimas, única en la cuenca mediterránea porque se celebró en el interior de una Base Naval), una cita ahora de creciente importancia tanto para el Mediterráneo como para Italia.

Durante los trabajos académicos de Seafuture Partimos de la constatación de que, a lo largo de los siglos, las actividades humanas han explotado dos dominios, la tierra y el mar, y que desde el siglo XX, gracias al cambio tecnológico, se ha añadido primero el cielo, luego el espacio y, más recientemente, el dominio cibernético.

Vivimos en una era caracterizada por enormes transformaciones de las cuales al menos tres merecen especial importancia y son el regreso de la competencia geopolítica, la aceleración tecnológica y el cambio climático.

Estas tres transformaciones están desafiando muchos de los supuestos sobre los que se han desarrollado nuestras estrategias, políticas, ejércitos y economías.

Cabe destacar que también hay una competencia renovada en el ámbito marítimo. Esta es la razón por la que, desde hace años, venimos hablando de "Cuarta Batalla por el Atlántico", pero también crece la aprensión por la competencia en el Mediterráneo (oriental), por la militarización del Mar de China Meridional por parte de la China Popular o por el Ártico y el Estrecho de Malaca y el Estrecho de los Dardanelos controlados por la autarquía turca.

Desafortunadamente, no podemos ignorar lo que ha estado sucediendo desde el comienzo de la agresión en Ucrania. Por un lado, hay intensos enfrentamientos que afectan principalmente a la dimensión terrestre, pero, por otro, no podemos ignorar el crecimiento de la presencia de activos navales -superficiales y submarinos- que son la piedra angular de las operaciones de la Armada rusa.

¿Qué pasó con el oleoducto? corriente norte 2 (la dinámica y cuál de las partes en conflicto aún no está aclarada) debe hacernos reflexionar sobre la seguridad y necesidad de defender los cables submarinos, gasoductos y oleoductos.

Tanto en el pensamiento estratégico ruso como en sus prácticas militares, el ataque indirecto, híbrido o no convencional siempre ha jugado un papel central. El daño a la represa Kakhovka también podría incluirse en esta serie, con la debida cautela en la atribución de paternidad. Por tanto, es importante centrarse también en la vulnerabilidad de los mares y las aguas, y en particular, de lasubmarino, en esta fase geopolítica, que puede ser aprovechada por adversarios y competidores para socavar el bienestar y la seguridad nacional, o como una forma de coerción para debilitar nuestra unidad o nuestras políticas.

Durante los trabajos en La Spezia, el subsecretario de Estado de Defensa, Matteo Perego di Cremnago, subrayó cuán vital es para nuestro país lo que está sucediendo sobre y debajo de la superficie del Mediterráneo.

La invención de los submarinos, a principios del siglo XX, cambió radicalmente el control y la contienda por los mares. En concreto, en el contexto geopolítico actual, por el retorno de la competencia estratégica, la aceleración tecnológica y el cambio climático, el mundo submarino está asumiendo, y asumirá, una importancia creciente:

- alrededor del 80% de los tránsitos comerciales mundiales por mar y submarinos son los medios más efectivos para interrumpir el comercio naval, ya que son más difíciles de detectar;

- el fondo marino ofrece importantes recursos naturales: además del gas y el petróleo, que ya explotamos, hay reservas de plata, oro, cobre, manganeso, cobalto y zinc;

- el gas y el petróleo también son transportados por gasoductos y oleoductos submarinos;

- Internet, y por tanto las comunicaciones modernas, dependen de cables submarinos, por los que se mueven cada día unos 10 billones de dólares.

Cuando se habla de submarino, es útil recordar que conocemos la Luna mucho mejor que las profundidades del mar y esta es la razón por la cual, el mundo submarino aún permanece relativamente escasamente poblado, ciertamente menos poblado que los dominios terrestres y aéreos.

Los avances en robótica, automatización, sensores y comunicaciones hacen que el mundo submarino esté cada vez más abierto a la nueva penetración humana, tanto civil como militar.

El uso de plataformas no tripuladas, autónomas, semiautónomas o automatizadas ofrece importantes oportunidades, incluida la capacidad de operar de manera más continua en algunas áreas y, por lo tanto, realizar más monitoreo. Pero este uso también puede representar una trampa o una amenaza, cuando es obra de actores o adversarios malévolos.

Los desarrollos en sensores permiten una mejor y más profunda comprensión, en todos los sentidos, del mundo submarino, incluidos los efectos del cambio climático e identificar los recursos naturales a explotar. Esta mayor actividad submarina debe ser fomentada, apoyada, regulada e incluso monitoreada.

Finalmente, las mayores y más intensas comunicaciones entre las plataformas de superficie, submarinas y del lecho marino representan una importante transformación para el mundo. submarino.

El uso de drones submarinos comerciales ya es un hecho: pueden ser una fuente de entretenimiento, pueden tener fines comerciales, pero también pueden usarse con fines militares. Sin embargo, estos drones pueden ser interceptados, secuestrados o la información que recopilan extraída maliciosamente de la misma manera en que ahora estamos dolorosamente acostumbrados a varios tipos de ataques cibernéticos, desde el fraude digital hasta el bloqueo de sistemas informáticos completos.

Cuando se habla de submarino, generalmente se piensa en amenazas militares planteadas por submarinos y amenazas híbridas a cables y oleoductos y gasoductos. Desafortunadamente, estas amenazas no terminarán y probablemente aumentarán en intensidad y también podrían surgir nuevas trampas. Las comunicaciones submarinas, cada vez más frecuentes e intensas, serán objeto de ataques cada vez mayores para recopilar información de forma maliciosa, pero también para engañar a los operadores e incluso secuestrar sistemas submarinos, con o sin personal a bordo.

Es pues evidente que parece más que necesario equiparnos para este futuro, desde un punto de vista normativo, desde un punto de vista operativo y doctrinal, y finalmente desde un punto de vista tecnológico e industrial.

En el citado debate, abierto con una intervención del subsecretario Perego de Cremnago “Cuando el ciber toca el mar”, se acordó que hoy asistimos a una connotación sin precedentes de la dimensión cibernética, podemos definirla como el “Ciber-Submarino”. El Contraalmirante Procaccini reiteró que la Armada tiene un rico y consolidado patrimonio de conocimientos en el mundo submarino, resultado de una experiencia secular adquirida por nuestras tripulaciones y con medios, a menudo innovadores en términos de concepción y tecnología aplicada al mar. La conciencia de lo desafiante que es contrarrestar las amenazas submarinas y del riesgo potencial que estas amenazas representan para nuestros intereses nacionales, impone la urgencia de implementar acciones concretas para dar respuestas, a través de iniciativas encaminadas a incrementar la seguridad de nuestras infraestructuras estratégicas.

Para adquirir y mantener la soberanía tecnológica será necesario desarrollar la capacidad de percibir inmediatamente, incluso anticipar, las pautas del desarrollo tecnológico, al mismo tiempo que se desarrollan medidas efectivas para explotar las oportunidades en el plano militar, donde los escenarios comienzan a definirse en cuyo campo de batalla se verá afectado por amenazas híbridas, mayor competencia por el acceso a los recursos naturales (estén donde estén), explotación de los dominios cibernético, espacial y cognitivo, intensificación de la presencia en elsubmarino.

En conclusión, el medio submarino, el dominio submarino, representa una gran oportunidad para la humanidad, pero requiere una gran responsabilidad y voluntad de encontrar fondos para alimentar esta capacidad operativa nacional. Es claro que nuestro país también debe proteger y preservar el ecosistema marino: solo así podremos explotar los recursos marinos de manera sostenible y garantizar un futuro duradero para la humanidad en términos de seguridad, independencia energética, investigación y bienestar. ser.

¡Feliz 10 de junio, feliz Día de la Marina!

General Giuseppe Morabito

(Miembro de la junta de la Fundación del Colegio de Defensa de la OTAN)

Foto: Armada