Los sueños comerciales de Pakistán saboteados por el lastre de "hierro" aliado

(Para Andrea Cucco)
15/07/23

Cuando el vicepresidente de la Comisión Militar Central de China, el general Zhang Youxia, se reunió con el presidente del Estado Mayor Conjunto de Pakistán, Sahir Shamshad Mirza, en Beijing el mes pasado, dijo: "la férrea amistad entre Pakistán y China ha superado la prueba de las vicisitudes internacionales y es sólida como una roca”.

El colega del sur, para no quedarse atrás, respondió con un "La amistad entre Pakistán y China es más alta que las montañas, más profunda que los océanos, más fuerte que el acero y más dulce que la miel”.

País vas, retórica encuentras...

El sometimiento ahora "irónicamente" a China ha llevado a Pakistán a someter su ejército (incluido el entrenamiento de oficiales) a los programas de entrenamiento chinos. Pekín es también el principal proveedor de equipamiento militar de Islamabad: desde tanques VT-4 hasta cazas JF-17 Thunder, hasta lanchas patrulleras, fragatas y submarinos.

La realidad para los paquistaníes, más allá de las palabras rituales con ocasión de las cumbres, es sin embargo menos alegre: una dramática crisis económica lleva mucho tiempo obligando a Islamabad a buscar todas las vías para recaudar divisas.

Ucrania: la ocasión cínica

El mercado mundial de la defensa tras la guerra ruso-ucraniana está en auge. Para Pakistán representa una oportunidad comercial para la producción y exportación de armas y municiones con, además, el afán de conquistar nuevos mercados, en Oriente Medio y el Sudeste Asiático en particular.

Hay un problema: Las industrias de defensa de Pakistán están medianamente desactualizadas y sería vital adquirir maquinaria y equipos modernos. El empresa conjunta con proveedores occidentales, sin embargo, corren un riesgo extremo (para aquellos que logran ver la evidencia… ¡salvo traición!), con un propietario chino que no reconoce los derechos de autor y roba tecnología.

Por lo tanto, la pregunta para todo operador industrial inteligente y "patriota" (incluso a un nivel mínimo de "sindicato") debería ser: ¿Firmamos con Islamabad o Beijing?

Mientras haya guerra hay esperanza.

Sin embargo, el conflicto ruso-ucraniano, mientras tanto, brinda a Pakistán la oportunidad de exportar (y no "regalar") armas y municiones, ganando las codiciadas divisas. El suministro de munición de artillería de 155 mm solo a Kiev (Islamabad sueña con convertirse en un importante exportador de munición de 155 mm de la OTAN) está generando enormes beneficios.

A la luz de la dinámica geopolítica en Asia, China ve a Pakistán como un país que, habiendo comprometido hace mucho tiempo la confianza de sus antiguos aliados occidentales, será leal y obediente hasta el final. Los préstamos de infraestructura de Beijing (carreteras, ferrocarriles, puertos...) no carecen de "interés" político.

Sin embargo, las ambiciones de Pakistán de convertirse en un exitoso exportador militar se vieron comprometidas originalmente por la presencia del aliado. Un régimen, despreciativo de los derechos humanos (empezando por los de sus ciudadanos), que la mayoría de las naciones, no sólo de Asia y el Indo-Pacífico, se preparan a afrontar…

Foto: Ministerio de Defensa Nacional de la República Popular China