El Estado de Israel obtiene alrededor del 60% de sus necesidades energéticas de los campos de gas natural ubicados frente a su costa y ha comenzado a exportar gas a sus vecinos árabes, como Jordania y Egipto. Además, los israelíes están llevando a cabo un proyecto, con Chipre y Grecia, para la construcción de un gasoducto submarino capaz de abastecer también a Europa.
Con tanto en juego, las milicias pro iraníes de Hezbolá en el Líbano han identificado las instalaciones de gas israelíes como objetivos prioritarios.
Israel se toma en serio estas amenazas. Durante la operacion Plomo Husillo En 2006, en el Líbano, un misil de crucero de Hezbollah alcanzó un buque de guerra israelí Sa'ar 5, matando a cuatro miembros de la tripulación. Como prueba del hecho de que incluso entonces, los milicianos de Hezbollah tenían sistemas de misiles capaces de alcanzar objetivos navales también.
La Armada israelí está recibiendo cuatro nuevas unidades, fabricadas en Alemania, destinadas a proteger los recursos energéticos del estado judío en el Mediterráneo Oriental.
Las nuevas corbetas, llamadas Sa'ar 6, protegerán la ZEE (Zona Económica Exclusiva) de 200 millas de Israel. La industria del gas natural, vista como un recurso nacional, está en el centro del interés estratégico nacional.
Los nuevos barcos estarán equipados con radares más potentes y otros sistemas electrónicos, y podrán navegar incluso en condiciones climáticas adversas.
La clase Sa'ar 6 tiene una longitud de 90 metros y un desplazamiento de aproximadamente 2.000 toneladas cuando está completamente cargada. Las unidades están equipadas con las últimas tecnologías de radar y electrónicas que la industria israelí puede proporcionar, así como una panoplia de sistemas de armas de fabricación nacional. Según lo que se ha filtrado, las corbetas Sa'ar 6 están equipadas con un radar AESA giratorio multibanda ELM-2258 ALPHA como sensor principal y suite ESM / ECM, integrado con tres lanzadores de engaños.
El armamento consta de un cañón Super Rapido de 76/62 mm; 4 lanzadores de misiles tierra-aire de largo alcance de ocho celdas, con capacidad antimisiles, Barak-8 (alcance máximo 100 km); 40 lanzadores verticales (VLS) para misiles tierra-aire Iron-Dome de alcance medio (alcance máximo 70 km); 4 lanzadores cuádruples para misiles antibuque /tierra atacar Gabriel V (alcance máximo 400 km); dos lanzadores de torpedos antisom de 324 mm y dos torretas remotas Typhoon RW con cañones de 25/80 mm.
Israel firmó el contrato de compraventa de los cuatro Sa'ar 6 en 2015, por un valor de aproximadamente 430 millones de euros por unidad. Por poner un ejemplo, los FREMM comprados por la Armada se pagaron por unos 600 millones de euros cada uno, con un desplazamiento tres veces superior pero con una capacidad de ataque y defensa decididamente menor.
"La clase Sa'ar 6 es una de las máquinas de guerra más avanzadas del mundo, lo que representa un avance significativo en las capacidades de las Fuerzas Armadas israelíes para garantizar nuestra seguridad en el mar y en las operaciones navales"., sentenció el jefe de las FDI, el teniente general Aviv Kohavi.
Imágenes: IDF
