La tensión sigue siendo muy alta en el norte de Kosovo después de los enfrentamientos y tiroteos del domingo entre la policía local y varios grupos de extremistas serbios.
En el enfrentamiento hubo 5 víctimas. Además del policía asesinado y de los tres alborotadores serbios, recientemente se encontró el cuerpo de otro presunto atacante. Así lo afirmó el fiscal de la región norte de Kosovo, Naim Abazi, quien explicó que el cadáver, localizado por los agentes que regresaron hoy para examinar la zona, fue encontrado a más de un kilómetro del lugar del accidente.
Algunos medios kosovares afirman que el número de muertos es mayor pero aún no hay confirmación. La Fiscalía de Kosovo informó de la detención de 6 serbios acusados de actividades subversivas y ataques armados a las fuerzas policiales.
El presidente kosovar, Vjosa Osmani, ha proclamado hoy día de duelo nacional en memoria del oficial muerto en el violento tiroteo. El conflicto armado tuvo lugar durante la noche del sábado al domingo en la aldea de Banjska, dentro del municipio de Zvecan, en el norte de Kosovo de mayoría serbia.
El asedio y los enfrentamientos
Antes del conflicto armado, la policía kosovar intervino para retirar un control de carretera realizado por dos camiones serbios. Sin embargo, se abrió fuego contra los agentes desde diversas direcciones: uno de ellos murió y otros dos resultaron heridos.
El ataque fue realizado por un grupo de unos 30 rebeldes serbios armados, enmascarados y uniformados, acompañados por vehículos blindados.
Los enfrentamientos y tiroteos continuaron durante la mayor parte del día en el monasterio ortodoxo serbio de Banjska, ocupado por los atacantes. Por la tarde, las fuerzas policiales kosovares entraron en el territorio del monasterio, poniendo fin al conflicto.
Las acusaciones
El Primer Ministro Albin Kurti y el Presidente Osmani han acusado abiertamente al gobierno de Belgrado de apoyar a grupos criminales activos en el norte de Kosovo.
El presidente serbio, Aleksandar Vucic, condenó el asesinato del policía, pero responsabilizó del incidente a Kurti. Esto, según Vucic, sería el resultado de la "política terrorista y fuertemente antiserbia" adoptada por el gobierno de Pristina.
Además, parece que la policía kosovar también descubrió una cantidad importante de armas y municiones en algunos locales de la zona y en varios coches cerca del monasterio.
Marco: RAI
